El maíz: Pilar de la seguridad alimentaria y motor de desarrollo en el Perú

31 de enero de 2025

17:52

Con más de 550,000 hectáreas cultivadas anualmente, el maíz es clave en la economía peruana, proporcionando sustento a miles de familias y apoyando la industria ganadera. El desafío está en aumentar la producción nacional mediante semillas híbridas y tecnología avanzada para reducir la dependencia de importaciones y fortalecer la seguridad alimentaria.

El maíz es el cultivo más importante en extensión para el Perú. Desde el punto de vista de Seguridad alimentaria, es un cultivo estratégico para la alimentación humana y ganadera, y como cultivo, procesamiento y venta de maíz genera empleo y contribuye al desarrollo económico de las comunidades locales. 

En promedio se siembran unas 550,566 hectáreas de maíz anualmente a nivel nacional y alrededor de 85 mil familias dependen directamente de este cultivo, lo que demuestra su importancia socioeconómica para nuestro país. Del total de dicha área, aproximadamente 288 mil hectáreas corresponden a maíz amarillo duro, 211 mil hectáreas son de maíz amiláceo, 46,624 a maíz choclo y 4.3 mil hectáreas a maíz morado.

 

Maíz Amarillo Duro (MAD)

En el caso del MAD, se estima que aproximadamente el 87.8% del área total está destinada para la producción de grano (usado principalmente para la alimentación de pollos, cerdos y vacunos) y el 12.2% del área restante se destina a la producción de forraje (para alimentación de ganado lechero). En los últimos años se viene utilizando la planta de maíz para alimentación de animales menores (cuyes).

Los principales departamentos productores de MAD para grano se ubican en la región de la costa con 110 mil hectáreas y en la región de la selva con 178 mil hectáreas. Del total de área de MAD en la costa, 36 mil hectáreas aproximadamente se destinan para la producción de forraje (para alimentar al ganado vacuno).

En la región de la costa, los dptos de mayor área de MAD son: Lambayeque, La Libertad, Áncash, Lima, Ica y Arequipa, los cuales cuentas con zonas maiceras que se caracterizan por el uso de tecnología media a alta, uso semillas de calidad (híbridos) y con disponibilidad regular de agua. El rdto/ha. promedio de grano es de 10.3 a 11.4 tons/ha. (en algunos valles del norte chico el rendimiento ha superado las 16 tons/ha). Cabe mencionar que en la costa el uso de semillas de calidad (semillas híbridas) alcanza el 95% del área sembrada.

En la región de la selva, los dptos más importantes de MAD son San Martín, Loreto, Amazonas, Ucayali y Huánuco. En los últimos años, algunas zonas maiceras de los departamentos mencionado han mejorado el manejo del cultivo de MAD, por ejemplo: la conversión de uso de semilla de calidad se ha incrementado significativamente, (de grano a semilla híbrida), un mejor control de plagas y control de malezas, lo que ha permitido un incremento del rendimiento promedio que varia de 4 a 5 tons/ha actualmente, incluso han alcanzado en algunas zonas rdtos de 9 tons/ha. 

 

Maíz amiláceo

En el caso del cultivo de maíz amiláceo, la principal región productora es la sierra. Los dptos más productores de maíz amiláceo son: Cajamarca, Cusco, Apurímac, Ayacucho, Huancavelica, y otros (hay producción de maíz amiláceo en todos los dptos ubicados en la región de la sierra).

En la región de costa también hay variedades de maíz amiláceo, pero para la producción de maíz choclo (acompañar el seviche). El rdto productivo de maíz choclo está por las 18 tons/ha, y en el caso del grano seco (mote o canchita) el rendimiento está por las 3 a 4 tons/ha.

Un tema para destacar una vez más es que El Perú es considerado como el centro de origen del maíz y cuenta con una gran biodiversidad genética de 51 a 55 razas de maíces, principalmente amiláceos. La evolución de las razas se origina desde tiempos remotos en donde los agricultores, tuvieron un rol importante desempeñando una amplia gama de funciones en relación con la producción y el mantenimiento de las semillas. 

“Todas las razas de maíz amiláceo son variedades de polinización abierta, mejoradas en algunos casos por selección masal.  A diferencia del MAD, no ha habido un mejoramiento genético significativo y no se cuenta con híbridos de amiláceos en la actualidad, por tal razón, aún los rendimientos de las variedades amiláceas son muy variables y mucha de esa producción es para autoconsumo y el resto para comercializar en los mercados locales, aunque ya hay una pequeña producción comercial para exportación”.

 

El potencial del mercado nacional para el MAD

La demanda actual de MAD, solo de la industria avícola nacional por este producto, asciende a alrededor de los 5.8 millones de toneladas/año, sin embargo, la producción nacional de MAD grano llegó en el 2023 aproximadamente a 1.38 millones de tons/año, es decir, solo se logró abastecer el 23.7% de la demanda total de dicho grano, lo que significa que el sector demandante está obligado a importar el resto generando salida de divisas.

Para que la producción nacional de MAD pudiera atender la demanda nacional al 100% es necesario elevar los rendimientos, y para ello se debe contar con genética de alta calidad (híbridos de alto potencial de rendimiento y tolerantes a las principales enfermedades del cultivo), así como la aplicación de mayor tecnología al cultivo.

“El reto para mejorar los rendimientos, en el caso de la costa, es la mecanización del cultivo (siembra, fertilización y cosecha), mientras que en la selva se debe incrementar significativamente la tasa de uso de semillas de calidad (híbridos). De las 178 mil hectáreas de MAD que se cultivan en la selva, entre un 16% a 20% ya usa con semillas de calidad, lo que ha permitido incrementar su rendimiento de 2.5 T/ha a 5 T/ha”

Cabe mencionar que mayor área de siembra del maíz en la selva se ubica en las laderas y depende de las lluvias; además la mayoría de los productores no hace fertilización, ni control de malezas, lo que limita el rendimiento productivo.

 

“Si logramos que las 178 mil hectáreas de MAD que se cultivan actualmente en la selva y que tienen un rendimiento promedio de 5.0 tons/ha  se incrementen a 8.5 tons/ha con el uso de semilla hibrida, estaríamos hablamos de un incremento de la producción nacional de grano de casi 623 mil tons de grano; con esto pasaríamos a cubrir gran parte de las importaciones, lo que evitaría la salida de divisas y incrementaríamos significativamente los ingresos de esas familias de agricultores”.



Inicio de nota

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *